Los parásitos son pequeños organismos que pueden hacer
enfermar a tus peces. Es importante que conozcas los tipos que hay y por qué
aparecen para que puedas prevenirlos, asà como eliminarlos. No todos los
parásitos son malos para los animales y algunos pueden estar presentes en
pequeñas cantidades sin ser perjudiciales para la salud.
Hay dos tipos de parásitos: los externos o ectoparásitos,
que se encuentran en la piel, las aletas, las branquias o la boca; y los
internos o endoparásitos, que viven en la sangre, los tejidos o los órganos.
Hay parásitos que solo se transmiten de un pez a otro,
necesitando siempre un huésped; otros que pueden vivir en el agua hasta
parasitar al pez; y otros con ciclos de vida más complejos que implican a
varios huéspedes. Conocer el ciclo de vida de cada parásito es imprescindible
para elegir un buen tratamiento que los elimine.
SÃntomas de los parásitos en peces
A veces es difÃcil detectar si un pez tiene parásitos, ya
que no siempre los signos son evidentes a simple vista. Un pez que nada solo,
más lento o de lado puede ser un indicativo de que está enfermo. También si
notas que ha perdido peso, le cuesta mover sus aletas o ves que las branquias
se mueven más rápido de lo normal. El hinchazón también puede ser un sÃntoma de
enfermedad. Y, más visiblemente, cuando tienen manchas blancas, como en la
enfermedad de Ich.
Causas de los parásitos en peces
La mayorÃa de los parásitos aparecen cuando el agua no tiene
la calidad adecuada o por introducir un pez nuevo en el acuario sin antes haber
hecho cuarentena. Esto último es muy importante, ya que un solo pez puede poner
en riesgo la salud de los de toda la pecera.
Si notas a un pez enfermo, intenta aislarlo en otro acuario
para evitar que infecte al resto. Comprueba después con los test de agua los
valores para ver que sean los adecuados.
Casi todos los parásitos son oportunistas y aprovecharán el
momento justo para parasitar a tu pez como, por ejemplo, cuando está estresado.
Los parásitos en peces más comunes
Ich o enfermedad del punto blanco
Se puede ver fácilmente por pequeñas manchas blancas que
aparecen en la piel, las aletas y las branquias del pez. Cada mancha tiene un
parásito debajo de la piel por lo que, cuantas más manchas tenga el pez, más
infectado está. Es común verles rascarse contra las piedras o la grava.
La infección se puede transmitir a todos los peces de agua
dulce y especies tropicales. Por suerte, hay tratamientos eficaces para esta
enfermedad. Aquà puedes encontrar toda la información sobre el punto blanco: en
qué consiste, cuáles son los sÃntomas, su evolución, tratamiento y prevención.
Trichodina
Estos parásitos en peces se pueden detectar por una pelÃcula
grisácea de moco que se crea sobre el cuerpo del pez, especialmente visible
sobre los ojos o las zonas más oscuras de piel. Los peces pueden tener
problemas respiratorios y, aunque primero puede cursar con movimientos muy
rápidos al nadar, según avanza la infestación estarán apáticos.
Suele afectar a peces tropicales estresados o cuando son
demasiados en un acuario. El parásito se adhiere a la piel y se alimenta de
ella. No obstante, esta enfermedad no suele darse en peces sanos, fuertes y
bien alimentados.
Hexamita y Spironucleus
Aparecen pequeños agujeros en el cuerpo del pez, sobre todo
en la zona de la cabeza. En las lesiones también suele haber moco. Pueden
aparecer lesiones en la base de las aletas y el vientre tener apariencia hueca.
Estos parásitos se localizan en el tracto intestinal de los peces de agua dulce
y, a veces también en los tropicales.
Para evitar que estos parásitos en peces se multipliquen,
debes evitar la superpoblación, el estrés, los cambios de temperatura y una
mala alimentación, asà como mantener unas condiciones óptimas en el agua.
Piscinoodinium – Enfermedad Terciopelo
Los signos visibles son un revestimiento amarillo grisáceo
sobre la piel, las escamas y las aletas. Cuando la enfermedad está avanzada, la
piel puede pelarse en tiras, los peces no comen y flotan inmóviles en el agua.
Son parásitos que tienen vida libre y parasitaria. La enfermedad
se transmite normalmente al incorporar un pez nuevo en la pecera y es bastante
peligrosa ya que a veces no se detecta a tiempo.
Flukes monogénico
Parásitos externos que se alimentan de la piel y el tejido
de los peces, pero que no suelen ser peligrosos si se encuentran en pequeñas
cantidades. Aunque están enganchados a la piel, son difÃciles de ver a simple
vista.
Podemos llegar a detectarlos al notar problemas en la piel.
Estos parásitos en peces se pueden tratar de forma efectiva con baños de sal,
formalina, fosfato de dimetilo o praziquantel.
Argulus
Este ectoparásito, en cambio, es bastante visible. Se les
conoce como las garrapatas o los piojos de los peces. Se enganchan mediante
ventosas y succionan la sangre con una trompa que produce toxinas; estas
toxinas pueden llegar a matar a los peces de tamaño pequeño
Cuando se desprende del pez, deja heridas en su cuerpo que
pueden derivar a otras enfermedades secundarias al quedar expuesto. Además, se
adherirá a las paredes del acuario para poner huevos.
Estos parásitos pueden quitarse directamente de la piel del
pez con unas pinzas; al igual que en los perros, sin tirar, ya que se soltarán
ellos solos de las patas al apretarlos. Luego se limpia la herida con un
desinfectante como la povidona diluida al 50%. Pero si la infestación es en
todos los peces (poco probable), se desinfectará directamente todo el acuario.